La presente invención se refiere a un asiento no patógeno que permite al usuario estar sentado en posturas naturales y convenientes. Se trata, pues, de un asiento, preferentemente una silla, no patógeno.

ANTECEDENTES DE LA INVENCIÓN

El asiento más comunmente utilizado es la silla, que comprende un elemento de soporte o asiento propiamente dicho en el que se apoyan las nalgas y un respaldo en el que se apoya la espalda.

Sentarse es descansar el peso del cuerpo sobre las nalgas con las piernas colgantes o apoyadas en el suelo a través de los pies. Tal como se expone a con¬ tinuación, la silla tradicional presenta el inconveniente de que para sentarse fuerza al organismo a adoptar una postura patógena.

Los huesos ilíacos están formados por la fusión de tres huesos: el ilion, el isquion y el pubis. Entre los dos ilíacos está el sacro, que es la base de la columna vertebral. Entre el sacro y el ilíaco existe la arti¬ culación sacro-ilíaca, que permite un giro pequeñísimo en el plano sagital (vertical). Sobre el sacro se encuentra la zona lumbar de la columna con una curvatura natural o "lordosis".

En la bipedestación y en la postura en cucli¬ llas, que son posturas históricamente anteriores a la sedestación, el peso del tronco está sustentado por las extremidades anteriores flexionadaε, que apoyan a la pel¬ vis a través de las cabezas de los fémures . En estas pos¬ turas, se mantiene la lordosis lumbar, que corresponde a la posición natural de la columna vertebral.

En sedestación convencional, en cambio, la mayor parte del peso del tronco se apea a través de los isquiones y los glúteos, y no se asegura la lordosis lum¬ bar. La explicación de ello se debe a que el centro de gravedad del tronco cae delante de la columna, de modo que, al sentarse una persona en una silla, los isquiones se clavan en el asiento y funcionan como punto de apoyo del sistema ilíaco-sacro-región lumbar, tendiendo a desa¬ parecer la curvatura natural de tipo "lordosis", cambiando de signo y transformándose en "cifosis".

Esta posición resulta antinatural y, repetida con frecuencia, puede producir hernias discales y otras molestias. La silla convencional actualmente utilizada no tiene en cuenta el papel de punto de apoyo que juegan los isquiones, y por eso es un artefacto patógeno, que causa molestias al usuario y a la larga incluso lesiones.

La silla es, pues, un objeto patógeno porque sirve de apoyo al cuerpo humano forzándolo a una postura antinatural e inconveniente.

DESCRIPCIÓN DE LA INVENCIÓN

Con el asiento de la invención se consigue su¬ perar el citado inconveniente, mateniéndose la postura natural de lordosis lumbar y cifosis dorsal de la columna vertebral.

El asiento, objeto de la invención, se caracte¬ riza por el hecho de que el elemento de soporte cons¬ tituye un apoyo ilíaco-femoral que comprende dos zonas separadas por una línea sensiblemente recta y horizontal, una zona posterior que presenta una o dos concavidades adaptables a las nalgas, y una zona anterior que presenta dos superficies simétricas respecto a un plano central sensiblemente vertical, siendo cada superficie no Diana v

adaptable a cada uno de los muslos e inclinada respecto al plano horizontal y respecto al citado plano central o de simetría, con pendiente hacia delante y hacia fuera del asiento.

Los glúteos son utilizados como elemento de reparto de la carga que, en una silla tradicional, se acumularía en los isquiones. Las concavidades del apoyo ilíaco-femoral recogen la presión de los glúteos en una zona más amplia que la que permite una silla clásica. Según una realización preferida de la invención, estas concavidades pueden ser a modo de cráteres practicados en la base dura del asiento, rellenos de material flexible, siendo forrada dicha base de un cojín elástico. La cuidada adaptación del asiento a los glúteos proporciona una mayor superficie de contacto a menor presión.

Debido a las características del apoyo ilíaco- femoral, se fuerza la abertura de los muslos y su disposición en ángulo obtuso respecto al eje del tronco, de manera que se mantenga la lordosis lumbar.

El asiento puede comprender además un segundo elemento de soporte o apoyo lumbar que presenta una super¬ ficie convexa en todas direcciones, que se adapta a la cavidad lumbar del cuerpo humano favoreciendo la lordosis.

El usuario del asiento descansa su cuerpo sobre los apoyos citados. El asiento no patógeno es una silla que, gracias a la forma y disposición de sus elementos de apoyo, deja de ser un artefacto patógeno inductor de pos¬ turas inconvenientes. El asiento no patógeno sólo induce posturas sanas, convenientes, pues al no forzar a la pel¬ vis a bascular hacia atrás, permite conservar una lordosis lumbar similar a la de la bipedestación.

Los ángulos entre el tronco y los muslos, y entre muslo y pierna son mayores que en la silla clásica; ello no sólo favorece la correcta posición de la columna.

sino también el retorno venoso. Las zonas solicitadas por los apoyos no están atravesadas por nervios ni vasos que pudiera ser peligroso presionar. La presión ejercida sobre los glúteos en el asiento de la invención, al estar más repartida que en la silla clásica, resulta más conveniente al sistema circulatorio.

El asiento obliga a mantener una postura con¬ veniente, ya que si bien la descarga del peso del tronco sigue haciéndose principlamente a través de los glúteos, las cabezas de los fémures juegan un papel de transmisión del peso de las piernas que actúa como equilibrante del peso que el ilíaco recibe del tronco. Se consigue así, tal como se ha dicho, una postura sedente con una orientación de los segmentos corporales muy semejante a la de bipedes¬ tación con las piernas ligeramente flexionadas.

El apoyo lumbar apoya a la columna para cola¬ borar a mantener la lordosis conveniente, pero además des¬ carga parcialmente el peso de la parte superior del tronco.

Los pies, reposando en el suelo, descargan parte del peso de las extremidades inferiores. La descarga a través de los pies equivale aproximadamente al peso de las piernas, de la rodilla hasta el pie.

El apoyo lumbar, que asegura el mantenimiento de la lordosis, y el apoyo ilíaco-femoral, obligan a la pel¬ vis a adoptar una basculación anterior.

En las posturas con el tronco inclinado hacia atrás, el apoyo lumbar descarga más peso que en las pos¬ turas con el tronco vertical.

El asiento de la invención también puede com¬ prender un tercer elemento de soporte o apoyo cervical, que presenta preferentemente una superficie cóncava en todas direcciones, que se adapta al occipucio.

Con el tronco inclinado hacia atrás, por el

apoyo cervical se descarga el peso de la cabeza y una pequeña parte del peso del tronco. Entre el apoyo cervical y el lumbar, la regidez del tronco está asegurada por la caja torácica.

Opcionalmente, el asiento de la invención puede disponer de apoyabrazoε, preferentemente de forma ligeramente curva para adaptarse mejor al apoyo de los brazos, sea cual sea el ángulo formado por las piernas y el tronco.

De acuerdo con una realización de la invención el asiento de la invención se caracteriza por el hecho de que el apoyo ilíaco-femoral es una superficie continua alabeada.

Según otra realización, el apoyo ilíaco-femoral comprende una pluralidad de superficies tubulares cuya en¬ volvente coincide sensiblemente con una superficie con¬ tinua alabeada.

Según otra realización de la invención el asiento comprende un segundo elemento de soporte o apoyo lumbar que presenta una protuberancia central a la altura de la región lumbar que disminuye en importancia en el sentido de la región dorsal y presenta también a ambos lados de dicha protuberancia sendas superficies cóncavas, de modo que la superficie del elemento de soporte o apoyo lumbar es, por lo menos en su parte inferior, convexa en el centro y cóncava en los costados, siendo tanto la con¬ cavidad como la convexidad decrecientes en el sentido de la región dorsal.

Con esta forma, el apoyo lumbar favorece la lor¬ dosis ya que se adapta mejor al perfil de dicha curva.

Otra realización consiste en que el asiento com¬ prende un tercer elemento o apoyo cervical que presenta una superficie cóncava en todas direcciones de curvatura variable a modo de arco carpanel.

Con esta forma, el apoyo cervical se adapta mejor al occipucio, por ser la curvatura gradual.

El asiento de la invención también presenta un especial interés antivibratorio.

En el asiento tradicional de un vehículo, la vi¬ bración se transmite al conductor y a los ocupantes a tra¬ vés de los puntos de contacto entre el vehículo y las per¬ sonas. El asiento transmite su vibración directamente a la cadera y ésta a la columna a través de la articulación sacroilíaca. Si el ocupante está de pie, la vibración le llegará a través de los pies, y si tiene las piernas ligeramente flexionadaε, la vibración pasará por las ar¬ ticulaciones de las rodillas, de las cabezas de los fémures y la sacroilíaca, antes de llegar a la columna vertebral. De forma no consciente, el ocupante intentará que la fecuencia propia de su cuerpo no coincida,con la frecuencia de vibración del vehículo. Esto le será tanto más fácil cuanto mayor sea el número de articulaciones cuyo grado de empotramiento pueda ser cambiado.

En un asiento clásico, la cadera recibe buena parte de la energía de vibración que absorbe el ocupante, y entre la cadera y la columna vertebral la única articulación que le queda libre es la sacroilíaca, de es¬ caso ángulo de giro.

En el asiento de la invención, la vibración no llega directamente a los ilíacos, pues con pequeños movimientos del tronco y la acción de la musculatura, puede evitarse el contacto eficaz del asiento con los glúteos para impedir que las vibraciones se transmitan directamente a los ilíacos y, a través de ellos, a la columna vertebral. Así quedan libres las articulaciones de las cabezas de los fémures y, además, se han creado dos articulaciones entre los muslos y el asiento.

La acción de las vibraciones está pues amor-

tiguada por treε articulacioneε entre cada pie y la columna vertebral.

BREVE DESCRIPCIÓN DE LOS DIBUJOS

Para mejor comprensión de cuanto se ha expuesto se acompañan unos dibujos en los que, esquemáticamente y tan sólo a título de ejemplo no limitativo, se representan algunos casos prácticos de realización.

En dichos dibujos, la figura 1 muestra en perspectiva el apoyo ilíaco-femoral y el apoyo lumbar del asiento de la invención; la figura 2 muestra, también en perspectiva, una realización preferida del asiento de la invención con los treε apoyos, ilíaco-femoral, lumbar y cervical; la figura 3 es una vista en planta del apoyo ilíaco-femoral en el que se han indicado distintas sec¬ ciones representadas en las figuras siguientes; la figura 4 muestra una sección según la línea Al-Al'; la figura 5 muestra una sección según la línea A2-A2 ¹ ; la figura 6 muestra una sección según la línea A3-A3'; la figura 7 muestra una sección según la línea Bl-Bl ¹ ; la figura 8 muestra una sección según la línea B2-B2 ¹ ; la figura 9 es una viεta en perspectiva de una segunda realización del asiento de la invención; la figura 10 muestra esquemᬠticamente una figura humana en una postura de sedestación convencional; la figura 11 muestra una figura humana en la postura que tiene utilizando el asiento de la invención; y la figura 12 muestra una figura humana con los distintoε apoyoε ilíaco-femoral, lumbar y cervical; la figura 13 ueεtra una viεta en perεpectiva de otra realización del asiento; y la figura 14 es una vista frontal del apoyo dorsal y del apoyo cervical del asiento de la figura 13 junto con varias secciones de dichas piezas.

DESCRIPCIÓN DE REALIZACIONES PREFERIDAS

La figura 1 muestra los apoyos básicos del asiento de la invención: el apoyo ilíaco-femoral 1 y el apoyo lumbar 2. Los dos colaboran al mantenimiento de la lordosis lumbar, que corresponde a la postura representada en las figuras 11 y 12.

La figura 10 muestra la postura de sedestación convencional, en la cual la columna vertebral no presenta la lordosis lumbar.

Las figuraε 1 y 2 ueεtran una realización preferida del apoyo ilíaco-femoral, según la cual el apoyo ilíaco-femoral 1 es una εuperficie continua alabeada que se ajusta a la forma de laε corvaε y los gúteos de un in¬ dividuo medio.

Tal como puede verse en la realización preferida de la figura 2, el apoyo lumbar 2 está unido al apoyo ilíaco-femoral 1 y presenta una superficie convexa en todas direcciones que se adapta a la cavidad lumbar del cuerpo humano favoreciendo la lordosis.

Las figuras 4 a 8 muestran las distintas sec¬ ciones del apoyo ilíaco-femoral 1 indicadas en la figura 3.

Tal como muestran laε figuraε 1 y 3, el apoyo ilíaco-femoral 1 comprende doε zonaε la, Ib εeparadas por una línea le sensiblemente recta y horizontal. En las figuras 7 y 8 también puede verse la posición de esta línea en las εeccioneε longitudinaleε Bl-Bl' y B2-B2' .

Tal como mueεtran laε figuraε 1 y 6, la zona posterior Ib presenta dos concavidades 3,4 adaptables a las nalgas.

La zona anterior la presenta (figuras 1, 4 y 8) dos superficieε 5,6 εimétricas respecto a un plano Bl-Bl' central sensiblemente vertical, que define una línea 7 en

la superficie del asiento.

Las superficies simétricas 5,6 no son planas y se adaptan a cada uno de los muslos. Están inclinadas respecto al plano horizontal y respecto al citado plano central o de simetría, con pendiente hacia delante y hacia fuera del aεiento.

De eεta manera se fuerza la abertura de los mus¬ los y su disposición en ángulo obtuso respecto al eje del tronco, tal como muestra la figura, en la que se ha in¬ dicado el ángulo A, mayor de 90°.

Las figuras 2 y 12 muestran un tercer elemento de soporte o apoyo cervical 8 que está unido al apoyo lum¬ bar. En la realización preferida representada en la figura 12, el apoyo cervical presenta una superficie cóncava 8a en todas direcciones que se adapta al occipucio.

La figura 12 muestra dos elementos de apoyabrazos 8a,8b, de forma ligeramente curva que conjuga bien con cualquier posición relativa del tronco con respecto a las piernas.

La figura 9 muestra otra realización de la invención en la que el apoyo ilíaco-femoral 1 comprende una pluralidad de superficies tubulares 9,10,11,12 cuya envolvente coincide sensiblemente con una superficie con¬ tinua alabeada. En este caso, la concavidad a la que se adaptan las nalgas es el espacio comprendido entre dos su¬ perficieε tubulareε 11 y 12.

Tal como se representa en la figura 12, en el asiento de la invención, las vibraciones representadas por flechas F se aplican a los distintoε puntos de contacto: los pies 13, el apoyo ilíaco-femoral 1, el apoyo lumbar 2 y el apoyo cervical 8. Sin embargo, dichas vibraciones no llegan directamente a los ilíacos, pues con pequeños movimientos del tronco y la acción de la musculatura, puede evitarse el contacto eficaz del asiento con los

glúteos para impedir que las vibraciones se transmitan directamente a los ilíacoε y, a través de ellos, a la columna vertebral.

Como puede verse en la figura, la acción de las vibraciones está amortiguada por tres articulacioneε entre cada pie y la columna vertebral: la articulación sacro- ilíaca 14, la articulación del trocánter 15 y el eje de giro 16 existente entre el usuario y el apoyo ilíaco- femoral.

La figura 13 muestra un asiento con un apoyo olíaco-femoral 1, un apoyo lumbar 21 y un apoyo cervical 22.

Tal como puede verse por la sección Bl-Bl' el apoyo lumbar 21 presenta una protuberancia central a la altura de la región lumbar que disminuye en importancia en el sentido de la región dorsal.

Tal como puede verse por las secciones Al-Al' a A5-A5' presenta también a ambos lados de dicha protuberan¬ cia 23 sendas superficies cóncavas 24,25. La superficie del apoyo lumbar 21 es, por lo menos en su parte inferior, convexa en el centro y cóncava en los costados, siendo tanto la concavidad como la convexidad decrecientes en el sentido de la región dorsal, es decir, desde la sección A5-A5' a la sección Al-Al'.

En la misma figura 14 puede verse que el apoyo cervical 22 presenta una superficie cóncava en todas direcciones tal como se desprende de las εeccioneε Bl-Bl' y Cl-Cl'. Como puede verεe en la figura, la curvatura eε variable a modo de arco carpanel.